Despues de Poveda nos vamos al rio Tajo para hacer una de sus chorreras.
No podemos esperar mucho, no llevara agua, pero el resto es una incognita.
No podemos esperar mucho, no llevara agua, pero el resto es una incognita.
Ricardo en el primer rapell.
Nosotros pasamos un buen rato entre algun detrepe y varios rapeles de 10-11 metros de tipo escalon, por lo menos estamos en la sombra y no pasamos mucho calor.
Esta claro que es solo postureo
Antonio entre la vegetacion.
Nos ha resultado curiosa esta chorrera, no acaba directamente al Tajo sino que pierde verticalidad y se transforma en un torrente, seco en esta epoca, la pena es la enorme distancia que hay de combinacion de coches, aunque seguro que hay una manera de llegar a los rapeles sin coche, de hecho la que utilizaran los de los campamentos. Bueno un rato del dia ocupado,en algo que nos apasiona.
Y ahora a por el otro barranco.
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